Somos dos gotas en una confundida, que formamos un manantial de sueños y de ilusiones, de amores y desengaños; y aunque quisiéramos huir una de la otra, nos fusionamos, nos acercamos cada vez más; nos atamos a nuestras fantasías y a nuestro deseo de vivir intensamente cada momento. Somos agua y aceite, calor y frío, luna y sol, pero, aunque diferentes, ahí estamos, unidas como el blanco al marfil, como el aire a la vida, como la raíz a la tierra.
Mi amiga, te muestras ante el mundo sonriente, aunque en mi haya solo llanto, por esa indiferencia permanente hacia mí. ¡Te enorgulleces de ser quién eres! Te precias de tus logros y tus éxitos y de las batallas en las cuales has salido victoriosa, Pero te olvidas que soy yo la que te anima, te impulsa y no te deja desfallecer, aunque el mundo te haya herido en lo más profundo de tu altivez.
Amiga mía, mi inseparable compañía, mi cómplice, te conozco y se de la ternura, el dolor, el orgullo, la compasión y las situaciones que has vivido; aunque no lo quieras reconocer, soy yo quien guardo tus secretos, por eso anhelo tu compañía, aquella que vivimos y compartimos en nuestra niñez, cuando no había resentimientos, ni dolor; cuando colmadas de inocencia formábamos globos de colores que simbolizaban nuestras fantasías, en los que podíamos volar y ver el mundo desde arriba, sin que nada ni nadie nos hiciera daño.
Hoy estamos separadas, tú en tu mundo que te rodea y yo aquí, a veces tan sola que ni la misma soledad me acompaña. No te pido que cambies, simplemente, que me permitas ir a tu lado para labrar el camino que aún nos queda por recorrer.
Mélodi, 2002
Han pasado ya más de dos décadas,
desde aquel momento en que por primera vez te escuché, mi querida amiga. El
tiempo ha seguido su rumbo y las huellas han quedado, unas rubricadas en la
piel, con heridas que cuentan historias, de esas que nunca se revelan, pero que
hacen parte del diario vivir. Hay otras, que como improntas están tatuadas en el
alma, allí, ocultas tras una sonrisa que se enfrenta a la indiferencia cotidiana
y que a su vez es cómplice de otras que, al igual, callan momentos vividos que
cada uno guarda en su corazón, pero que deben ser disfrazados en este mundo
donde todo vivimos una farsa, tu vida puede ser todo un drama, pero debes vivirla
como una gran comedia.
Muchos han sido los caminos recorridos, unos desérticos y solitarios en
los que añoramos la fresca caricia de una gota que acaricie nuestra piel; otros
tan fértiles que como en la parábola del sembrador dan frutos y nutren por
doquier. Pero tu sigues ahí, junto a mí, sí guardando silencio y observando
cada uno de mis pasos.
¡He aprendido a conocerte, sabes! ¡No ha sido nada fácil! Porque he
debido callar, silenciar todo ese ruido que a diario nos acompaña. Enfrentar
mis culpas por haber actuado impulsivamente o haber callado palabras que al
expresarlas hubiera ayudado a expresar lo que sentía o me dolía. Eventos del
pasado que ya no puedo remediar, pero que bloquean sentimientos y emociones. Y
junto a mí, como sombras, me han acompañado la ansiedad, el miedo y la incertidumbre
al futuro, ese gigante que se empodera de nuestras vidas y nos impide disfrutar
el presente. Así es, he estado apartada de mi realidad, por alimentar sonidos
que perturban el proceso normal de la vida.
Todo ha sido un proceso, que ha surgido y
se ha fortalecido con los mal llamados problemas, esas circunstancias que generan
obstáculos a las dinámicas que tenemos programadas y que nos separan y desvían
de caminos ya trasados. Pero, vistos como impulsos, se convierten en fuerzas
activas que nos promueven a la acción de dinámicas que nos conducen a soltar,
desaprender y crear nuevas formas de vida. ….continúa…(Mélodi), abril, 2023.
Abril 22, 2023.
¡Por favor, guarda silencio que quiero escucharte!
Un día decidí callar y escucharme!
Una historia que terminó antes de empezar
Tengo ganas de ti - 2024
Esa era la idea que le rondaba a
él cada día. Si bien todo había pasado tan rápido, ya había un sentimiento que
no tenía nombre, pero que le perturbaba la mente cada día. Por su mente
rondaban pensamientos contradictorios, pues si bien se sentía atraído por ella,
una fuerza poderosa en su interior le decía que, así como vivía, solo en su
apartamento y sin más compañía que cada uno de sus recuerdos de su relación
pasada, de la que quedó una familia, de quienes aún continuaba frecuentando y
una que otra aventura que acompañaba su soledad en más de trece años de haber
decidido continuar solo. Las razones, eran múltiples, y se sentía bien de saber
que había tomado la decisión de alejarse y compartir su vida con la mujer que
lo apoyó siempre y estuvo presente en esos momentos de crisis y soledad. Y
aunque ella ya había partido, su presencia se sentía en cada uno de los
rincones de ese lugar que compartió con ella por más de una década.
Era solitario y discreto, de
pocos amigos, amante de la música, soñador, pero con miedo a entregar sus
sentimientos, por considerar que, así como vivía se sentía bien. Tal vez nunca
se había enamorado, eso fue lo que le expresó a ella en uno de esos primeros
encuentros que tuvieron. Le dijo que le gustaban las relaciones sin
compromisos, que lo importante era vivir intensamente cada momento. Ella por su
parte asintió, pero le dijo que tenía otra visión de la vida, que ese viaje en
el que hay varias estaciones no se podía limitar a un solo aspecto, que disfrutar
de otras áreas era más enriquecedor y placentero. Que eso se quedaba para los
años primaverales, en los que solo se piensa en el placer circunstancial,
dejando de lado la esencia, pero que al transcurrir los años aumenta el
contenido, lo fugaz es solo para los malos recuerdos, porque estaban en un
momento en que el tiempo recobra valor y se desea vivir cada instante
intensamente, pero con sentido.
Vivían distantes el uno del otro,
pero eso nunca fue obstáculo para él, quien, a pesar de las condiciones, cuando
tenía la oportunidad iba hasta donde ella vivía. Sabía que debía tomar uno, dos
o tres transportes antes de llegar a uno de los lugares acordados o a su casa. Y
así fue ese día, la ansiedad desde el amanecer por llamarla impidió que se
ocupara de algunos compromisos que debía hacer en la mañana. ¿Estaría ocupada?
¿le contestaría? Porque era frecuente que él marcara, una sola vez, y ella no
contestara. Sin embargo, ese día fue diferente, ella fue la que marcó. Era la
gran oportunidad, acordaron encontrarse y departir esa tarde. Él, algo nervioso
la saludó cariñosamente, ella sonriente, como solía serlo lo invitó a seguir. Los
dos anhelaban la cercanía, pero había alguien en casa, por lo que fue un
diálogo cortés pero cargado de nerviosismo, miradas, sonrisas y uno que otro
acercamiento disimulado. El propósito era compartir tiempo, así que caminaron
hasta el lugar que departieron el almuerzo. Cada uno pidió un plato diferente y
compartieron el menú. No podían volver a casa, luego, decidieron que verían una
película. Vieron la cartelera, quizás fue lo que menos tuvo importancia en ese
momento, pero finalmente se decidieron por una de suspenso, que él sugirió por
el protagonista. Debían esperar dos horas entonces, acordaron que tenían
suficiente tiempo para disfrutar de un helado. Mientras esperaban, hablaron de
varios temas, entre otros y el más importante para ellos, los momentos inolvidables
que habían vivido. No hubo muchas palabras, les bastó observar cómo sus pupilas
se dilataban y sus manos tímidamente entrelazadas temblaban.
Él hablaba de las sensaciones que
habían aflorado en su cuerpo, del deleite y la satisfacción que le produjo ese
acercamiento que lo transportó a un viaje colmado de emociones y experiencias
internas donde lo material se convierte en celestial. Por su parte ella,
entrecerraba sus ojos y con sonrisa nerviosa y voz sensual le hacía saber que él
era quien despertaba emociones que la hacían desinhibirse y sentir que podía
ser auténtica sin ser juzgada. El tiempo pasaba sin que alguno de los dos lo
notara. Ella sutilmente le dijo que la esperara o que si él lo requería podría
ir también. Ingresaron a ver la película y tomados de la mano compartieron unas
cuantas caricias. De repente ella retiró su mano y la puso sobre su pierna, lo
que le generó a él un gran nerviosismo que duró una gran parte del tiempo. El
tiempo es eterno para el que ama y fugaz para el que sufre, pero en esta
ocasión eran sentimientos encontrados, porque se hizo interminable cada escena
por el deseo que tenían de estar en otro lugar y efímero al saber que este
encuentro pronto terminaría. Todo transcurría normal, pero hubo dos eventos que
trastornaron el romántico encuentro. Mientras ella con sus caricias sutiles
perturbaba la concentración de él, en unas dos oportunidades su celular vibró,
evento que ella pareció ignorar, o por lo menos así le hizo ver a él. Unos
minutos más tarde él de forma discreta, pero que ella notó, miró el mensaje que
había recibido y minutos más tarde, de forma casi infantil, dijo que debía
salir por una necesidad física que tenía. Ella, como toda mujer, se mostró
comprensiva, pero su....CONTINÚA
Me lo contó la abuela
La nieta mala
🌻 ¿Por qué era mala?
🍂"Ella no hacía caso de lo que uno le prohibía. Salía, reía, jugaba con los amigos cuando llovía, se iba pal río, comía de todo, hasta creo que hacía cosas con el novíesito que tenía.
🌻¿Y alguna vez la vio deprimida?
🍂"Eso qués?"
🤷♀️Triste, llorando, abuela
🍂"¡Ah, nooo! ¡Ella era feliz!
🌻¿Y, ahora, sigue igual?
🤷♀️Si, yo soy la nieta mala. Sigo haciendo lo que me gusta y me hace sentir bien.
Abril 23, 2024
Antes huía de ti,
temía encontrarte,
te ignoraba,
Pero junto a mi estabas.
Eres sombra que a mi lado estás
y susurras a mi oído cuando busco paz.
Me conoces y estás presente
cuando de mi ser estoy ausente.
Eres yugo que al cuerpo atormentas
pero cuando te abrigo y acepto
a la mente del sufrimiento liberas.
Dolor, amigo y aliado
incomprendido y odiado
cuan valioso eres en procesos
para ver de la cara el otro lado
Si, cómo negarlo, son dolores intensos
Que quebrantan el alma y el cuerpo
Pero que solo comprendes
Cuando cruzas
Y el dolor has sanado
Ha llegado CONTINÙA
Hermosa ciudad que generosa nos brinda
a cada quien según su necesidad
y cada cual según su habilidad.
Imágenes tatuadas en muros y calles registran y cuentan historias que aun duelen y comprimen el corazón.
Recintos de oración que invitan
a minutos de regocijo y paz.
Corazones que transitan afanosos
alejados del presente.
Luces, sonidos, aromas, voces, imágenes, miradas, colores, sonrisas y llantos, todos juntos en esta jungla de cemento que nos invita a transformar nuestro actuar para hacer posible el sueño y el anhelo de un mejor vivir para todos.
Recuerdos de antaño
que nutren la vida presente.
Minutos que no esperan y un corazón ardiente. ✨🍃✨
Le pedí a la vida
que me diera
lo que yo anhelaba
y merecía.
Ella, me brindó
tiempo y sabiduría.
Y me dio una profecía,
compartir contigo
minutos colmados
de cariño y armonía!✨✨
Cómo decirte
No suelo decir te amo, eres la luz de mis ojos, sin ti me muero, eres lo mejor que me ha pasado en la vida, eres el único en mi vida y muchas otras frases que suelen decirse las parejas.
No, tal vez no escuches de mis labios esas palabras, porque lo que soy y lo que siento por ti lo expreso de otras maneras y eso, sólo tú lo sabes. ✨🌻✨
Recorrí caminos y veredas
queriendo olvidar que estás ausente
Pero ella, brillante y silente
Me recordó que estás tatuado
en mi corazón y en mi mente.✨😘✨
Pensando en tal y cual santo, en el camino de la vida también se requiere un manual con señales preventivas, porque hay curvas peligrosas, pronunciadas, hay que ceder paso, hay bifurcaciones que nos desvían de la ruta, hay superficies risadas, descensos peligrosos o depresiones en los que hay que ir con cuidado, estar atento a las barreras, reducir la velocidad, si hay oscuridad, prender la luces, ceder el paso, y si la situación es inmanejable, puede incorporarse a la derecha o a la izquierda del camino.
Le pedí a la vida que me diera
lo que yo anhelaba y merecía.
Ella, me dio tiempo y sabiduría
y me dijo que de nada carecía,
pero me conectó contigo
con quien he vivido toda una fantasía!
Marzo 25.
Conocer de cerca niveles extremos de sufrimiento nos permite valorar lo generosa que ha sido la vida con nuestro existir.
Ver la inocente mirada de un niño junto al lecho de su madre quien grita en silencio y acalla su sufrimiento es la representación de sufrimiento más vívida que he presenciado de María junto a su hijo crucificado.
Nuestro sufrimiento se hace leve, cuando vemos en otros seres, heridas físicas y emocionales que superan todo nivel.
¡Y si hacemos de hoy una fecha especial! Los minutos pasan, las distancias se acortan y estaremos tan cerca, que se acelerará el pulso, subirá la temperatura, tu te sumergirás en mi mar y navegaremos al compás de un sinnúmero de emociones dando rienda suelta a la imaginación. ¡Te animas!
"Momentos de felicidad que se disfrutan en libertad y eclipsan hasta fundirse en cálido ensueño. Fantasía que culmina, como con el ocaso la alborada…". (Mélodi)
¡Lo grato de tocar fondo es que se llega a la propia esencia, se superan miedos, perdonas culpas y sobre todo, dejas de buscar fuera lo que en abundancia la vida te entregó al nacer! (Mélodi)
¡Ya no le pido nada a la vida, agradezco por cada segundo que me brinda! (Mélodi)
Negarse a llorar, es como evitar limpiar las impurezas del alma. (Mélodi)
No quiero ser perfecta, prefiero ser una mujer colmada de sueños, defectos y algunas virtudes.
No pretendo que me amen, con que acepten mi locura y mi desorden, está bien. (Mélodi)
Feb. 10
Creía que para todo había una palabra, pero, de un tiempo para acá resulta difícil darle nombre a esos sencillos momentos vividos. ¿Será que ahora valoro más cada instante? (Mélodi)
Qué será que de un tiempo acá me resulta difícil darle nombre a esos momentos que comparto contigo.
Cada persona que pasa por nuestra vida va dejando una huella, pero sobre todo hacen que afloren el veneno o la miel que hay en nuestro corazón. (Mélodi)
Febrero 12.
Me pregunto si esto que se siente tan bonito en todo mi ser es lo que llaman felicidad. Si la energía que me transforma y pone en movimiento todo mi cuerpo es generada por esta fuerte la conexión contigo que aun en silencio siento que me compartes tus secretos, esos que han hecho girar mi mundo y encontrarme de frente con el tuyo.
Que más puede ser la felicidad, sino pequeños senderos recorridos que llenan de paz y armonía nuestro camino. (Mélodi)
Astronómicamente hablando hay ocasiones en que las relaciones interpersonales son como el equinoccio de verano, nos alineamos perfectamente. (Mélodi)
Pensando en tal y cual santo, en el camino de la vida también se requiere un manual con señales preventivas, porque hay curvas peligrosas, pronunciadas, hay que ceder paso, hay bifurcaciones que nos desvían de la ruta, hay superficies risadas, descensos peligrosos o depresiones en los que hay que ir con cuidado, estar atento a las barreras, reducir la velocidad, si hay oscuridad, prender la luces, ceder el paso, y si la situación es inmanejable, puede incorporarse a la derecha o a la izquierda del camino.
Le pedí a la vida que me diera
lo que yo anhelaba y merecía.
Ella, me dio tiempo y sabiduría
y me dijo que de nada carecía,
pero me conectó contigo
con quien he vivido toda una fantasía!
🌻 Cordial saludo:
ResponderEliminarDicen que nadie aprende de experiencias ajenas. Y la verdad, no se si es cierto o no, pero basada en mi experiencia personal, en que estoy contando la historia, porque la vida quiso que así fuera, puedo decir, que mucho del maltrato que estamos viviendo las mujeres es porque nos resistimos a cambiar esquemas familiares que traemos desde niñas. Hemos visto el maltrato como algo "natural, normal...." que nos lleva, a callar, a sentirnos culpables, a sentirnos merecedoras de lo que nos está pasando, a aguantar por tener alguna dependencia, económica, emocional, social o de otra índole.
Ante la pregunta ¿Qué vamos a hacer? yo respondo desde mi experiencia. Sensibilizar a la mujer que como ser humano, no solo como mujer, es valiosa; que debemos capacitarnos en algún arte o profesión para no tener dependencia económica; que debemos ser responsables con nuestro cuerpo y no tener hijos indiscriminadamente; que debemos poner límites en lo que respecta al trato interpersonal, verbal y emocional; que debemos tener una red de apoyo, amigos, familia...; saber que existen entidades oficiales que nos apoyan, asesoran y respaldan en estos casos; que hay que avisar a estas redes de apoyo y entidades tan pronto haya algún comportamiento de la otra persona, que me haga sentir mal, culpable, triste, insegura o cualquier otra emoción diferente al bienestar. Que pedir ayuda no es símbolo de debilidad, sino de autocuidado. Y sobre todo, atender a las recomendaciones que nos dan. Porque, suele pasar, que nos dicen, nos alertan, nos previenen, pero hacemos caso omiso, porque creemos que no es grave, va a cambiar, fue por mi culpa, soy yo la que lo hace enojar, en fin, justificamos todo.
Desde mi experiencia, considero que, a estas alturas, donde hay tantos medios, no podríamos afirmar que estos casos se dan por desinformación, sino por falta de acción de la víctima.
Con aprecio. 🌻